Noticias de las Américas, Nueva York, NY, lunes 2 de septiembre de 2024: Estados Unidos ha incautado un avión Dassault Falcon 900EX que era propiedad y operado en beneficio del presidente venezolano Nicolás Maduro Moros y sus afiliados. La aeronave, que fue exportada ilegalmente desde Estados Unidos, fue aprehendida en la República Dominicana y posteriormente trasladada al Distrito Sur de Florida a petición de las autoridades estadounidenses. Esta acción se basó en violaciones de las leyes de control de exportaciones y sanciones de Estados Unidos.
El fiscal general Merrick B. Garland anunció la incautación y afirmó: “Esta mañana, el Departamento de Justicia confiscó una aeronave que, según alegamos, fue comprada ilegalmente por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma y sacada de contrabando de los Estados Unidos para su uso por Nicolás Maduro y sus compinches. El Departamento seguirá persiguiendo a quienes violen nuestras sanciones y controles de exportación para evitar que utilicen recursos estadounidenses para socavar la seguridad nacional de los Estados Unidos”.
El subsecretario de Control de Exportaciones, Matthew S. Axelrod, agregó: “Que esta incautación envíe un mensaje claro: las aeronaves adquiridas ilegalmente de los Estados Unidos para el beneficio de funcionarios venezolanos sancionados no pueden simplemente desaparecer”.
La investigación estadounidense reveló que a finales de 2022 y principios de 2023, individuos vinculados a Maduro utilizaron una empresa fantasma con sede en el Caribe para ocultar su participación en la compra ilegal del Dassault Falcon 900EX, valorado en aproximadamente 13 millones de dólares, a una empresa del Distrito Sur de Florida. La aeronave fue exportada ilegalmente desde Estados Unidos a Venezuela a través del Caribe en abril de 2023. Desde mayo de 2023, ha volado principalmente hacia y desde una base militar en Venezuela, donde se ha utilizado para transportar a Maduro en viajes internacionales.
El fiscal federal del Distrito Sur de Florida, Markenzy Lapointe, destacó la importancia de la incautación y destacó la colaboración entre las autoridades estadounidenses y la República Dominicana en esta operación. “Nuestra oficina, junto con nuestros socios en la aplicación de la ley, seguirá trabajando para confiscar este avión y todos los demás activos que eluden la ley”, dijo Lapointe.
La Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio en Miami, junto con la División de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y el Grupo de Trabajo El Dorado de HSI en Miami, están a cargo de la investigación. El caso está a cargo de los fiscales federales adjuntos Joshua Paster y Jorge Delgado para el Distrito Sur de Florida, con la asistencia de la Sección de Contrainteligencia y Control de Exportaciones de la División de Seguridad Nacional.
Estados Unidos expresó su agradecimiento a la República Dominicana por su ayuda en este asunto, subrayando la cooperación internacional involucrada en la aplicación de las sanciones estadounidenses y las leyes de control de exportaciones.
El gobierno venezolano ha calificado el acto de “piratería”.
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