En los últimos días ha surgido cada vez más información sobre la muerte de Matthew Perry el pasado mes de octubre.
Y cada detalle ha sido más desgarrador que el anterior.
A principios de esta semana, nos enteramos de que se habían realizado múltiples arrestos en relación con la muerte del actor porque obtuvo ketamina de médicos y traficantes de drogas sin receta.
Luego supimos que el propio asistente de Perry, Kenneth Iwamasa, había inyectado al querido actor el día de su muerte.
Ahora, según documentos judiciales recientemente publicados obtenidos por NBC News y publicados el 16 de agosto, Perry habría pedido ayuda a su asistente Kenneth Iwamasa para administrarle el medicamento tres veces en esta fecha.
Refiriéndose a esta droga, el ex alumno de Friends le pidió a Iwamasa que “le inyectara una bien grande”.
Según todos los informes, estas fueron las últimas palabras que Perry le dijo a alguien antes de su sobredosis.
Perry fue encontrado muerto en el jacuzzi de su casa de Los Ángeles el 28 de octubre… y más tarde se determinó que la causa de su muerte fueron los “efectos agudos de la ketamina” a causa de un accidente relacionado con un ahogamiento.
Sin embargo, no era la primera vez que Perry experimentaba los efectos negativos de la anestesia disociativa.
Perry tuvo una “reacción médica adversa” a una inyección de ketamina en casa el 12 de octubre, dijeron los fiscales en estos mismos documentos recientemente revelados.
Los abogados dicen ahora que el Dr. Salvador Plasencia (quien ha sido arrestado) inyectó al actor de 54 años “una gran dosis” de la sustancia controlada a petición de Iwamasa (quien también ha sido acusado en el caso) después de que el actor ya se había sometido a una terapia de infusión de ketamina en el consultorio de un médico.
El último procedimiento estaba prescrito legalmente; el primero, no.
El Departamento de Justicia afirma que la ketamina administrada en casa provocó un “aumento significativo” en la presión arterial sistólica de Perry, lo que le hizo “congelarse” tanto que “no podía hablar ni moverse”.
Y hay más:
Si bien las tres inyecciones mencionadas anteriormente provocaron la muerte de Perry en octubre, Iwamasa afirmó haber administrado 27 en total en los últimos cinco días de vida de Perry.
(Para que conste, Iwamasa no tiene ninguna formación médica y estaba siguiendo instrucciones dadas por Plasencia).
Iwamasa, quien descubrió el cuerpo de Perry, se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina causando muerte, según las autoridades.
En relación con esto, Plasencia enfrenta un cargo de conspiración para distribuir ketamina, siete cargos de distribución de ketamina y dos cargos de alteración y falsificación de documentos o registros relacionados con la investigación federal.
No se ha declarado culpable públicamente.
Perry luchó contra el abuso de sustancias durante muchos años, pero aquellos cercanos al actor creían que estaba limpio en el momento de su fallecimiento.
La estrella detalló su batalla en sus memorias “Friends, Lovers and the Big Terrible Thing: A Memoir”, en las que Perry concentró gran parte de su energía en usar su experiencia para ayudar a otros a mantenerse limpios y sobrios.
Warner Bros. escribió en un comunicado sobre el actor cómico después de su muerte:
“Estamos devastados por el fallecimiento de nuestro querido amigo Matthew Perry. Matthew era un actor increíblemente talentoso y una parte indeleble de la familia de Warner Bros. Television Group.
“El impacto de su genio cómico se sintió en todo el mundo y su legado vivirá en los corazones de muchas personas.
“Este es un día desgarrador y enviamos nuestro amor a su familia, a sus seres queridos y a todos sus devotos fanáticos”.
