News Americas, Nueva York, NY, lunes. 21 de octubre de 2024: La jueza federal e inmigrante caribeña Tanya Chutkan volvió a ser noticia el viernes 18 de octubre, cuando ordenó la publicación de más de 1.800 páginas de pruebas muy redactadas relacionadas con el caso contra el expresidente Donald J. Trump. Los materiales fueron publicados a pesar de las objeciones del equipo legal de Trump, quienes argumentaron que hacer pública cualquier información antes de las elecciones equivaldría a una interferencia.
“Si el tribunal retuvo información a la que el público tenía derecho a acceder únicamente debido a las posibles consecuencias políticas de su divulgación, esa retención podría constituir en sí misma –o parecer ser– una interferencia electoral”, escribió la jueza Chutkan en su fallo del 17 de octubre.
La evidencia, vinculada a las afirmaciones de los fiscales federales de que Trump intentó anular las elecciones de 2020, incluía un apéndice de cuatro partes presentado por el fiscal especial Jack Smith. Aunque gran parte del documento sigue redactado, el juez Chutkan defendió la publicación y afirmó que retenerla podría verse como una forma de interferencia electoral en sí misma.
Desde entonces, Trump ha reaccionado enérgicamente, etiquetando a la jueza Chutkan, que nació en Jamaica, como “la persona más malvada” y acusándola de contribuir a la interferencia electoral al revelar las pruebas. Criticó la decisión durante una aparición en un podcast, alegando que la medida tenía motivaciones políticas y comparando el trato a los alborotadores del Capitolio con el internamiento de estadounidenses de origen japonés durante la Segunda Guerra Mundial.
La evidencia recientemente publicada incluye en su mayoría material que ya es público, como partes de las declaraciones del ex vicepresidente Mike Pence sobre no revocar los resultados electorales. Si bien estos documentos no parecen presentar nuevas acusaciones importantes, ofrecen un contexto adicional al caso.
La decisión del juez Chutkan sigue al fallo de julio de la Corte Suprema de que ciertas acciones de un presidente pueden estar protegidas por inmunidad. El tribunal encargó al juez Chutkan determinar qué pruebas siguen siendo admisibles, y el equipo de Trump responderá antes del 7 de noviembre.
A pesar del intenso escrutinio, el juez Chutkan ha sostenido que las decisiones legales no se verán influenciadas por el calendario de campaña en curso de Trump.