El presidente electo Donald Trump anunció el sábado que el ex embajador en Alemania y máximo leal Richard Grenell se desempeñará como enviado presidencial para “misiones especiales”, poniendo fin a semanas de especulaciones sobre el papel del grandilocuente aliado en la segunda administración Trump.
En una publicación de Truth Social, Trump dijo que su ex director interino de inteligencia nacional y enviado especial para el diálogo entre Serbia y Kosovo “trabajará en algunos de los lugares más conflictivos del mundo, incluidos Venezuela y Corea del Norte”.
El alcance del puesto recién creado no está claro y el equipo de transición de Trump no respondió a una solicitud de más detalles. Dado el aparente enfoque en los puntos críticos globales, es posible que la cartera de Grenell incluya Irán, Siria, Yemen, Sudán, Haití o cualquier otra crisis.
El anuncio resuelve el misterio del papel que ocuparía Grenell en la segunda administración Trump, después de que el nombre de Grenell estuvo notoriamente ausente en el torrente de altos cargos iniciales de la administración y el gabinete. Grenell había presionado para ser nombrado secretario de Estado, pero perdió ante el senador de Florida Marco Rubio, frustrando más voces de política exterior de derecha. También rechazó el puesto de director de inteligencia nacional.
Luego, las especulaciones giraron en torno a la cuestión de si Grenell sería designado enviado especial para Irán o la crisis Rusia-Ucrania, o si recibiría una embajada de alto perfil.
En los últimos días, Trump había señalado que el leal terminaría con un puesto importante. Trump publicó el miércoles por la noche en Truth Social que: “Richard Grenell es una persona fabulosa, UNA ESTRELLA. ¡Estará en algún lugar, en lo alto!
La posición de Grenell podría prepararlo para un conflicto con Rubio y no quedó claro en el anuncio cómo interactuará el papel de Grenell con el Departamento de Estado.
La publicación de Trump no especificó si Grenell enfrentaría un proceso de confirmación. Los enviados especiales, por ley, deben recibir la confirmación del Senado, pero la administración Biden en ocasiones ha eludido esa cuestión modificando las descripciones de los puestos. Grenell, un pugilista defensor del presidente electo, podría enfrentar algunas críticas de los legisladores, pero aún es probable que sea confirmado si enfrenta un proceso de confirmación en el Senado.